Juguetes para toda la vida
Una de mis películas favoritas en el mundo es Toy Story. No
importa si es el 1, el 2 o el 3, las tres me encantan y no importa si se
comenzó a ver otra cosa a la misma hora, en mi casa se va a cambiar de canal
para ver Toy Story.
Para los que no conocen la historia, se trata sobre un grupo
de juguetes que pertenecen a un niño llamado Andy. Woody es un muñeco vaquero
que es el juguete favorito desde que Andy lo recibió en kínder, es el que
organiza y siempre cuida de los demás. Tiene un ataque de celos y envidia
cuando llega Buzz Lightyear, el personaje del momento convencido de que es un verdadero
guardián espacial que lucha contra el malvado Emperador Zurg (“enemigo jurado
de la alianza galáctica!”...si no viste no entendiste).
La película se centra en la lealtad y amistad que existe
entre estos juguetes y su amor a su dueño, al punto de ponerse en peligro por regresar
con Andy y mantenerse juntos. Hay un momento en el que Woody explica cuál es el
propósito de ellos: “No importa cuánto
juegue con nosotros, lo importante es que estemos aquí para Andy cuando nos
necesite, para eso nos hacen.” Esa es, creo yo, la característica esencial
de una amistad: el estar ahí. Y no me refiero solo a momentos de necesidad como
algo malo, hay veces que “necesitamos” distraernos, necesitamos hablar,
necesitamos que nos acompañen a algún lugar, necesitamos que traigan otros
amigos para completar equipo. Un amigo es alguien que se da cuenta de tu
necesidad y está ahí dispuesto a cubrirla.
Obviamente este sentimiento debe ser recíproco. Suelo ver
que las personas ponen que ellas están para todos pero nadie para ellas, no se
si será cierto o sólo quieren que les tengamos lástima. Buscate otros amigos
entonces y ya, no es tan difícil como se piensa. La Biblia da la estrategia
perfecta: “el hombre que quiere amigos, ha de mostrarse amigo”. O sea, el que
quiera tener amigos, que empiece por SER un amigo primero. Para mí que la
persona que tiene buenos amigos es porque sabe ser uno. Yo tengo los mejores
amigos del mundo, y me parece que si personas tan maravillosa como ellas están
dispuestas a pasar tiempo conmigo, algo bueno estaré haciendo.
Me encanta la parte cuando Woody le dice a Buzz “en esa casa hay un niño que cree que eres lo
máximo, y no porque seas un guardián del espacio, sino porque eres un juguete,
eres SU juguete”. Creo que un buen amigo es ese que con su actitud te hace
sentir amado, que vales su tiempo, vales esa parte de su vida que te está
dando. Que no te escribe para reclamarte sino para invitarte, que no se pone
celoso de tus otros amigos sino que se hace amigo también de ellos. Que no se
burla de tus creencias, al contrario, las comparte. Que no se ríe de tus más
descabellados sueños, sino que se busca algo que hacer para ser parte y poder
ayudarte a cumplirlos.
Y así como Woody hizo que Buzz se dé cuenta de cuánto Andy
le amaba, un buen amigo es el que te acerca a Dios, busca que estés bien con él
y te acompaña “al infinito y más allá”.
♫Yo soy tu amigo fiel ♫ |
No hay comentarios:
Publicar un comentario